lunes, 11 de mayo de 2015

Cautivador escrito de Mari Montes sobre Bob Abreu, aparecido en PRODAVINCI el 30/9/2014.

http://prodavinci.com/2014/09/30/vivir/bob-kelly-nombre-de-grandeliga-por-mari-montes/
Alberto Salcedo Ramos nos deleita hablándonos de Rubén Blades en este articulo de PRODAVINCI del 17/10/2014.  Altamente recomendado.


http://prodavinci.com/2014/10/17/actualidad/blades-siempre-blades-por-alberto-salcedo-ramos/
Un excelente escrito de Sumito Estévez publicado por PRODAVINCI el 11/1/2015 al cual le hice uno de los tantos comentarios que recibió.

http://prodavinci.com/blogs/yo-el-subversivo-por-sumito-estevez/
Recomiendo este extraordinario artículo de Leonardo Padrón publicado en PRODAVINCI el 23 de febrero de 2015, al cual me permití hacerle un comentario.


http://prodavinci.com/blogs/pero-tenemos-tania-por-leonardo-padron/


Como siempre, Leonardo, luego de leerte nos extraes un sentimiento de admiración y de agradecimiento para contigo.  Incluso, por más duros y realistas que son tus escritos que como efecto primario nos enfrentan al implacable espejo y por más tristes o generadores de vergüenza que terminan siendo y que en consecuencia se traducen en una medida de nuestra capacidad de mantener la dignidad haciendo acopio de nuestras reservas de autoestima, no dejan también de ser esperanzadores y de dosificarnos esas aparentemente últimas gotas que quedan en el frasco de ánimo para permitirnos ver a pesar de la densa niebla que la vela al final del túnel aún no han logrado apagarla.  Definitivamente, la gran diferencia entre ellos y nosotros, y entiéndase por ellos a quienes les adversamos políticamente, aquellos que por interés o convencimiento respaldan, defienden y, sin duda, le exprimen ingentes beneficios a ese ejercicio de secuestro y usurpación grosera de poder, está directamente relacionada con el intelecto, con el talento.  Decía Juan Verdaguer en escena, aquel humorista uruguayo de finales de los sesenta: “lo que hay que hacer para ganarse la vida; para dedicarse al teatro, hay que saber hacer algo, y yo sé hacer algo.  Hay que tener audacia, y yo soy audaz. Hay que tener talento, y yo soy audaz”.  Lo que para él era un sarcasmo parte integrante de su libreto, siempre me ha parecido hecho a la medida para describir a estos nuevos gobernantes de esta moderna república, comenzando por Chávez mismo.  La Venezuela posible, la Venezuela digna, la añorada, es esa Venezuela que se sustenta en el talento, en el emprendimiento, es ésa que tiene a Tania, te tiene a ti, a Amanda, a Caridad, a Carlota, a Gledys, a Mariaca, a Mariale, a Mariángel, a Zapata, a Laureano, pero también a Franklin Brito, a Leopoldo o a cualesquiera de los perseguidos y vejados políticos, a tanto estudiante mancillado, a Jorge Roig, a Lorenzo Mendoza; en fin.  Y esa pequeña gran diferencia no va a ser fácil de superar o igualar; por más que los repriman, los encarcelen o intenten anularlos o destruirlos nunca podrán socavar un ápice de su dignidad, de su valía y por ende de su huella.  Gracias una vez más, Leonardo; por insistir, por persistir.  Menudo ejemplo tenemos los venezolanos de a pie con ustedes, integrantes del primerísimo elenco de la escena nacional.  Cada vez más se desengañan las focas, como se ha dado en llamar a esos seguidores ciegos del proceso que padecen de un muy triste bozal de arepas, intelectual por demás.  Siempre creo que tarde o temprano, lamentablemente quizás más tarde que temprano y con mucho costo, se impondrá la razón, la lógica, y tanta farsa terminará por desplomarse sola.  Esta guerra civil de ideas contra balas está tornándose cada vez más difícil de sostener para nuestro enemigo.  Seguiremos en el frente.

miércoles, 10 de julio de 2013

Miss You

Una de mis canciones preferidas, tal vez la más de The Rolling Stones banda que venero hace más de 40 años, "Miss You" fue compuesta y editada por Mick Jagger y Keith Richards como sencillo en 1977 e incluida en el álbum "Some Girls" de 1978.  La utilizo como homenaje a mi muy querido amigo Gonzalo Ponce.  Amigo y querido por partida triple: compartimos bachillerato, baseball y rock en nuestras tempranas juventudes.  Hoy, al intercambiar mensajes alusivos al rock con motivo de su cumpleaños, me envió el vídeo oficial de promoción moderna del tema "It's Only Rock 'N' Roll (But I Like It)" también de los Stones, sencillo que dio nombre al disco "It's Only Rock 'N' Roll" de 1974, lo cual hizo que me propusiera esta entrada para mi Blog.  Espero que sea de buen augurio para él.




(original)

I've been holding out so long
I've been sleeping all alone
Lord I miss you
I've been hanging on the phone
I've been sleeping all alone
I want to kiss you

Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
Oooh oooh oooh oooh

Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
Oooh oooh oooh oooh

Well, I've been haunted in my sleep
You've been starring in my dreams
Lord I miss you
I've been waiting in the hall
Been waiting on your call
When the phone rings
It's just some friends of mine that say,
"Hey, what's the matter man?
We're gonna come around at twelve
With some Puerto Rican girls that are just dyin' to meet you.
We're gonna bring a case of wine
Hey, let's go mess and fool around
You know, like we used to"

Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah

Oh everybody waits so long
Oh baby why you wait so long
Won't you come on! Come on!

I've been walking in Central Park
Singing after dark
People think I'm crazy
I've been stumbling on my feet
Shuffling through the street
Asking people, "What's the matter with you boy?"

Sometimes I want to say to myself
Sometimes I say

Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
Oooh oooh oooh oooh

Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
I won't miss you child

I guess I'm lying to myself
It's just you and no one else
Lord I won't miss you child
You've been blotting out my mind
Fooling on my time
No, I won't miss you, baby, yeah

Lord, I miss you child

Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah

Lord, I miss you child

Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah

Lord, I miss you child

Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah


(traducción libre)

He estado aguantándome tanto tiempo
He estado durmiendo totalmente solo
Dios, te extraño
He estado colgado del teléfono
He estado durmiendo totalmente solo
Quiero besarte

Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
Oooh oooh oooh oooh

Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
Oooh oooh oooh oooh

Bueno, he estado obsesionado cuando duermo
Has sido la protagonista de mis sueños
Dios, te extraño
He estado esperando en el hall
He estado esperando tu llamada
Cuando el teléfono suena
Son sólo unos amigos míos que dicen,
"Hey, ¿qué es lo que pasa hombre?
Vamos a pasar a eso de las doce
Con unas muchachas portorriqueñas que se mueren por conocerte.
Vamos a llevar una caja de vino
Hey, vayamos a pasarla bien y a divertirnos
Ya sabes, como solíamos hacerlo"

Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah

Oh todo el mundo espera tanto tiempo
Oh nena por qué esperas tanto tiempo
¿No vendrás?  ¡Vamos!

He estado caminando en Central Park
Cantando después de que oscurece
La gente piensa que estoy loco
He estado dando tumbos
Arrastrando los pies por la calle
Preguntándole a la gente,  "¿Qué pasa contigo muchacho?"

A veces quiero decirme a mí mismo
A veces digo

Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
Oooh oooh oooh oooh

Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
Oooh oooh oooh oooh oooh oooh oooh
No te extrañaré nena

Supongo que estoy mintiéndome a mí mismo
Eres tú y no nadie más
Dios, no te extrañaré nena
Has estado nublándome la mente
Jugando con mi tiempo
No, no te extrañaré, nena, sí

Dios, te extraño nena

Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah

Dios, te extraño nena

Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah

Dios, te extraño nena

Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah aaah aaah aaah
Aaah aaah aaah aaah

jueves, 4 de julio de 2013

Gethsemane (I only want to say)

En la ópera rock, género que si intentáramos ajustarlo a la estricta academia podría lucir poco formal aunque en realidad no es así, encontramos ejemplos notables y de grata recordación sobre todo para los que en la filiación con la música hemos sido rockeros de origen y de pasión.  Jesus Christ Superstar marcó un hito para nuestra generación.  Musical de Broadway de 1971 con música de Andrew Lloyd Webber y libreto de Tim Rice, dio origen a la película dirigida por Norman Jewison en 1973, año de mi graduación de bachiller cuando contaba 16 noviembres y transitaba una full adrenalina adolescente.  El aria que nos ocupa, clímax de esta ópera para mí que aún hoy me conmociona, me enfrentó incluso al concepto basal de mi para entonces profunda formación religiosa, redireccionándolo un tanto.  La escena ocurre luego de la Última Cena cuando los apóstoles duermen y Jesús se dirige a orar al huerto de Getsemaní.  Ted Neeley (1943) fue el seleccionado para escenificar, magistralmente, ese rol en la película.  Sustituía a Ian Gillan, excepcional cantante de la mítica banda británica de hard rock Deep Purple, a quien naturalmente le correspondía hacerlo por haber grabado ese personaje en el disco de 1970, pero que declinaría esa participación por compromisos profesionales previos.  Veamos a Neeley 33 años después, con una poderosa y conmovedora performance en directo; noten el asombro y la emoción del resto del cast así como del personal técnico.





(original)

Will no one stay awake with me?
Peter?  John?  James?
Will none of you wait with me?
Peter?  John?  James?

I only want to say,
If there is a way,
Take this cup away from me
For I don't want to taste its poison.
Feel it burn me,
I have changed.
I'm not as sure, as when we started.
Then, I was inspired.
Now, I'm sad and tired.
Listen, surely I've exceeded expectations,
Tried for three years, seems like thirty.
Could you ask as much from any other man?
But if I die,
See the saga through and do the things you ask of me,
Let them hate me, hit me, hurt me, nail me to their tree.
I'd want to know, I'd want to know, My God,
I'd want to know, I'd want to know, My God,
Want to see, I'd want to see, My God,
Want to see, I'd want to see, My God,
Why I should die.
Would I be more noticed than I ever was before?
Would the things I've said and done matter any more?
I'd have to know, I'd have to know, my Lord,
Have to know, I'd have to know, my Lord,
Have to see, I'd have to see, my Lord,
Have to see, I'd have to see, my Lord,
If I die what will be my reward?
If I die what will be my reward?
Have to know, I'd have to know, my Lord,
I'd have to know, I'd have to know, my Lord,
Why should I die? Oh why should I die?
Can you show me now that I would not be killed in vain?
Show me just a little of your omnipresent brain.
Show me there's a reason for your wanting me to die.
You're far to keen and where and how, but not so hot on why.
Alright, I'll die!
Just watch me die!
See how I die!
Then I was inspired.
Now, I'm sad and tired.
After all, I've tried for three years, seems like ninety.
Why then am I scared to finish what I started,
What you started - I didn't start it.
God, thy will is hard,
But you hold every card.
I will drink your cup of poison.
Nail me to your cross and break me,
Bleed me, beat me,
Kill me.
Take me, now!
Before I change my mind.


(traducción libre)

¿Nadie permanecerá despierto conmigo?
¿Pedro?  ¿Juan?  ¿Jacobo?
¿Ninguno de ustedes esperará conmigo?
¿Pedro?  ¿Juan?  ¿Jacobo?

Sólo quiero decir,
Si hay una manera,
Aleja este cáliz de mí
Porque no quiero probar su veneno.
Siento cómo me quema,
He cambiado.
Ya no estoy tan seguro, como cuando empezamos.
Entonces, estaba inspirado.
Ahora, estoy triste y cansado.
Escucha, seguramente he superado las expectativas,
Traté por tres años, que parecen treinta.
¿Esperarías lo  mismo de cualquier otro hombre?
Pero si muero,
Continúo la saga y hago las cosas que esperas de mí,
Dejo que me odien, me golpeen, me lastimen, que me claven a su árbol.
Me gustaría saber, me gustaría saber, Dios mío,
Me gustaría saber, me gustaría saber, Dios mío,
Quiero ver, me gustaría ver, Dios mío,
Quiero ver, me gustaría ver, Dios mío,
¿Por qué he de morir?
¿Sería más importante de lo que nunca fui antes?
¿Las cosas que he dicho y hecho seguirían importando?
Tendría que saber, tendría que saber, mi Señor,
Tengo que saber, tendría que saber, mi Señor,
Tengo que ver, tendría que ver, mi Señor,
Tengo que ver, tendría que ver, mi Señor,
¿Si yo muero cuál será mi recompensa?
¿Si yo muero cuál será mi recompensa?
Tengo que saber, tendría que saber, mi Señor,
Tendría que saber, tendría que saber, mi Señor,
¿Por qué debo morir?  Oh, ¿por qué debo morir?
¿Puedes demostrarme ahora que no iban a matarme en vano?
Muéstrame sólo un poco de tu cerebro omnipresente.
Muéstrame que hay una razón por la que quieres que yo muera.
Das mucha importancia al dónde y cómo, pero no tanto al porqué.
Está bien, moriré!
Sólo mírame morir!
Mira cómo muero!
Entonces yo estaba inspirado.
Ahora, estoy triste y cansado.
Después de todo, lo he intentado por tres años, parecen como noventa.
¿Por qué entonces tengo miedo para terminar lo que empecé?,
Lo que tú empezaste - Yo no lo empecé.
Dios, tu voluntad es dura,
Pero tienes todas las cartas.
Beberé tu copa de veneno.
Clávame en tu cruz y rómpeme,
Desángrame, vénceme,
Mátame.
Llévame, ahora!
Antes de que cambie de opinión.

miércoles, 3 de julio de 2013

El país de las focas

[aun cuando escrito en enero de 2012, conserva vigencia]

Me refiero a nuestra querida Venezuela donde, según entiendo, no cohabita ese cariñoso animal de cuello corto y bigote o al menos no es sabido por mí si lo hace alguna de sus especies, pero donde sí encontramos otros especímenes más numerosos y menos simpáticos, eso sí, bastante más predecibles que por tener comportamientos como los de esos pinnípedos hacen que podamos catalogarla de esa manera.  Basta con que veamos cualquier intervención pública de Chávez, incluso cuando se dirige a sus cada vez menos nutridos auditorios en televisión, u observemos alguna sesión de la Asamblea Nacional o de tantos otros escenarios institucionales del Estado Venezolano para notar de inmediato que los que aplauden o condescienden con esas farsas pretendiendo validarlas, por la forma ritual en que lo hacen, se comportan como focas en un circo; es una sensación indefectible.  Dicen los entendidos que el lenguaje corporal expresa tanto como el de las palabras; así, lastimosamente, nos percatamos del triste tenor de esos aplausos y de las expresiones patéticas en sus rostros para interpretar la excesiva adulación que profesan, o deben profesar, por esa mentira humana.  A mi juicio, ese efecto poco tiene que ver per se con un ilusorio poder hipnótico del orador, más bien lo tiene con el porqué de esos aplausos y la naturaleza de quienes los dan.  Y no sólo se trata de esos mamíferos a los que Chávez tiene amaestrados por el bolsillo, léase sus cogobierneros o cualquier otro empleado público incluidos los militares, sino que también existen focas dentro de la población común.  Por cierto, siempre creeré que una buena porción de estas últimas también sucumbe por el bolsillo, por recibir de igual manera prebendas o regalos del amaestrador mayor, del propietario del circo que las involucra en el festín que significa el usufructo impúdico, indiscriminado, excluyente y a fondo perdido de las riquezas del país, de ese flujo de caja enorme que provee cómoda y consecuentemente la industria petrolera, todavía a pesar del comité de facinerosos que la regenta, al tiempo que para nada son focas por creer en o seguir algún tipo de ideología o sumarse a alguna causa que sea meramente política y coherente.  No perdamos de vista que muchas serán las veces que habrán de conformarse con la sola promesa del regalo, pues éste nunca llegará.  En la otra mano, el asunto resulta igualmente infame cuando esos aplausos no son comprados o no han sido impuestos como condición para el salario; eso nos demuestra la paupérrima disponibilidad de discernimiento de esa fracción de público general: focas por incapacidad mental a las que literalmente, en lenguaje de calle, “se les cae la baba” por el domador.  Mas esa hipnosis monetaria se ha extendido a otros parajes extra fronteras, es por eso que podemos conseguir focas gobernando focas en otros países, focas con entrenador importado, todas focas, éstas y aquéllas, vasallas de nuestro esperpento del siglo XXI.  Ahora bien, ¿por qué a estas alturas del partido seguimos consiguiendo comportamientos como éste cuando la información o, más propiamente, el acceso a ella, por un lado, y la comunicación por el otro se han masificado para convertirse en los bastiones de las libertades de los pueblos, de sus figuraciones y buenas ejecutorias, es decir, del verdadero ejercicio de la democracia?  Y no me refiero únicamente a los hechos políticos noticiosos en nuestro patio sino también a la historia mundial, la reciente y la no tanto, a la economía global y a la comunicación en tiempo real.  ¿Acaso esa gente no lee, no ve televisión, no escucha la radio, no accede a la Internet, no ve las barbas del vecino ardiendo e indaga con él?  ¿No piensa, no discurre?  Que eso le haya sucedido a Cuba por ejemplo, no es un mito.  Allí lo más eficaz que hizo el Estado fue aislar a la población colocándole unas grngolas para evitar que se informara y se comunicara logrando así el efecto pretendido, cual fue el de que ese pueblo no pudiera ver más allá de su propia perentoriedad de vida, no se enterara de por dónde realmente iba el Mundo; algo así como que lo conminó a vivir dentro de un huevo, engaño y totalitarismo adelantes, aparte de que tiene mucha relevancia la circunstancia de que ese evento se dio en otra época y en otro contexto y como resultado de una revolución cierta, válida o no, pero cierta; no esta burla anacrónica y sin sentido, carente de toda justificación y sustento que este cáncer de nuestra historia, enfermo de histrionismo, fracasado militarmente además, ha querido imponernos.  Lo más triste y a la vez penoso: que los encargados de estudiar y catalogar los comportamientos de los humanos sitúan al que nos ocupa rayano con la estupidez, con la idiotez.  He debido entonces titular estas líneas: “El país de los idiotas”.  Precisamente, viene a mi memoria el símil, o realidad histórica, plasmado y excelentemente tratado en el par de eminentes ensayos escritos por esos tres pensadores de la actualidad: Plinio Apuleyo Mendoza, Carlos Alberto Montaner y Álvaro Vargas Llosa.  Por mi parte yo, sin pertenecer a ningún gremio de analistas de la personalidad ni pretenderlo, voy a aventurarme a analizar esos porqués.

En primer lugar y no me cansaré de repetirlo, padecemos de una muy baja autoestima; o de su ausencia absoluta.  Esta afirmación la sostengo tanto para los individuos como para la comunidad.  No debería ser posible que un discurso tan trasnochado como el de Chávez, tan mediático e inmediato, mediocre por demás, cale como lo ha hecho hasta ahora en la mayoría de los votantes; o al menos no es lo lógico.  Pero lo peor, continúa calando gracias a la hemorragia de dólares del Estado y como forzado síntoma de esa pobreza intelectual generalizada.  Resulta que todo aquel que se quiera y que se respete a sí mismo, poco valor y poca cabida debería concederle a esas ideologías de pacotilla y mucho menos habría de hacerlo con los impostores que las lideran, amén de que ese individuo con amor propio preferirá siempre haberse ganado lo que tiene fruto de su trabajo en lugar de haberlo obtenido como limosna malsana; digamos que esto sí tiene lógica.  Claro, existe un engaño sistemático en el discurso: “ahora serás dueño de lo que por derecho siempre te ha pertenecido” en referencia a la principal fuente de riqueza del país, como que si en el pasado reciente no hubiese sido así, mientras el domesticador lo único que hace es utilizar ese pretexto para despilfarrar y manipular a su antojo y conveniencia esos patrimonios sobre los que nominalmente el pueblo tiene derecho y que nunca llega a disfrutar efectivamente.  Pregunto: ¿acaso no es mejor aprovechar los beneficios producidos por esos caudales repartidos adecuadamente según los lineamientos de una economía de mercado donde se valore y se recompense el esfuerzo, el trabajo, la iniciativa propia, la empresa privada, en lugar de ser dueños fantasmas de un intangible del que nunca logra verse por ningún lado el resultado de la gestión gracias a su ocultamiento y desvío premeditados para en definitiva terminar teniéndose menos o nada?  Las focas caen en el engaño, se creen dueñas, ahora, del petróleo, mas creo simple entender sin necesidad de demostración que el pueblo venezolano percibe menos beneficios de su explotación hoy, es menos su dueño que lo que fue a partir de 1975 cuando su industria fue nacionalizada, o lo que continuaba siendo en 1985 o en 1995.  Al final, eso de trabajar, de producir, de pensar en la familia y por ende en la comunidad, de pretender ser ciudadanos de mejor clase está en la mente y en el corazón de cada quien.  Las sociedades nacen de los individuos; no al revés.  Es cierto que en términos sociológicos el conjunto representa más que la suma de las partes; precisamente deberíamos apostar por tener “partes” de calidad.

En segundo lugar, muy a pesar de que muchos venezolanos viajados por el mundo y en el  mismo suelo patrio han dejado sentado lo contrario, el habitante común siempre espera que sea otro el que haga sus deberes, que trabaje por él, que resuelva por él e inclusive que le provea el sustento; funciona como una especie de derecho falso adquirido históricamente.  Será comodidad, “viveza criolla”, holgazanería, falta de iniciativa o, muy probablemente, ignorancia y elucubración mental pero no hay duda de que somos la mar del mínimo esfuerzo, en parte, culpa de estos Estados paterno populistas tan típicos de la región que nos han acostumbrado a ofrecernos todo y de todo a cambio de votos y, también, por causa de nuestra propia historia de emancipación en la que no estuvo incluido algún período de hambruna o de carestía extrema, sólo guerras civiles muy románticas pero con poco nivel de involucramiento social.  Nacemos con derechos, con muchos, pero con pocos deberes, aparentes, a esperar por el amamantamiento de la mamá Patria.  Definitivamente, la clase política en el súmmum de su demagogia se ancla en este argumento y comercia con esa ignorancia generalizada.  Pretendemos ser más vivos que los demás y terminamos escupiendo hacia el cielo.

Es ésta entonces una diáfana conclusión: el problema fundamental en esta dolida Venezuela lejos de ser únicamente histórico, político, económico, geográfico o de “guerra asimétrica contra el Imperio” termina siendo esencialmente sociológico: tiene que ver con la gente.  Solucionarlo significará trabajar con esas focas tema de esta disertación y, en condición sine qua non, con sus descendientes.  Dícese rápido, pero serán procesos de proyección del hombre aunque, más aún, de recuperación, de reconstrucción del individuo, de volver al verdadero venezolano, aquel que nunca peleó en la calle con sus conciudadanos porque no convalidaran su manera de pensar y que le atribuía mucho valor a los grados académicos y culturales que había obtenido; aquel que consistentemente dejó muy en alto el nombre del país en el mundo gracias a su irrefutable figuración profesional; aquel que se bien valoraba a sí mismo y se interesaba por formar parte de una sociedad que tuviese peso específico.  Proyecto que lógicamente requerirá de mucho tiempo, tesón y buena voluntad.  Largo trayecto para llegar a tener un país con individuos de número y no con focas, a menos que sea para disfrutar de sus espectáculos en el circo o en la televisión.

30 de enero de 2012